(21 de marzo, Día Mundial del Síndrome de Down)

Tus ojos son distintos a los míos. Me gustan más los tuyos. Mi cara es distinta a la tuya; tu dices que a la gente le gusta más la mía. Tu bondad es mejor que la mía.
Hoy me han mirado con cara rara, tú dices que te pasa constantemente, cuando me senté en el taburete de la barra de aquel bar, en el banco de la plaza y en la terraza de la cafetería a la que suelo ir a almorzar. No me pasó, como dices que a ti te ocurre, por mis ojos, o por la forma de mi cara, ocurrió porque algunas personas se rieron de mis calcetines desparejados.
Algunos de mis compañeros de trabajo, no se dieron cuenta de que los llevaba así, me ignoran, tal y como dices que a ti te pasa habitualmente; otros señalaron mis calcetines en la oficina. hubo alguien que me preguntó si me encontraba bien, si había pasado una mala noche, mientras hacía un gesto con los ojos señalando hacia mis pies. Todo por llevar dos calcetines distintos
Al parecer ninguno de ellos sabía que hoy es el día de llevar los calcetines desparejados. Como gesto —al final no es más que eso— que sirve para visualizar nuestras diferencias y así concienciar sobre la importancia de la inclusión en el Día Mundial del Síndrome de Down.
Es la iniciativa a la que un año más se han sumado asociaciones, instituciones y sobre todo ciudadanos para llenar las redes sociales de calcetines de todos los colores, tamaños y formas.
Esta campaña tiene su origen en Reino Unido, donde Chloe Lennon, una niña británica de 5 años publicó en 2018 un vídeo en redes sociales pidiendo que, para celebrar este día, que cada persona llevara un calcetín distinto en cada pie. No veas la que se lió.
Llegados a este punto tienes tres opciones:
1.- Pasar de todo. Estás en tu derecho. De todas formas te lo podrías plantear.
2.- ¿Has participado? Comparte tu foto.
3.- No lo has hecho, no pasa nada, aún estás a tiempo. Manda tu foto.
Recuerda colocar la etiqueta #CalcetinesDesparejados. Busca este hashtag y verás…
Gracias por leerme y participar.
PD. Esta una buena manera de aprovechar aquellos calcetines desparejados que ya te conté hace tiempo y que puedes recordar pinchando aquí.